El pasado 25 de abril se cumplieron 50 años del levantamiento popular-militar pacífico que hizo de los claveles un símbolo de victoria y esperanza. Unas flores que los ciudadanos repartieron a los soldados que lideraban la revolución y que éstos colocaron en las bocas de sus fusiles y hasta en los cañones de los tanques. De este hito en la historia lusa y de esos claveles que representan democracia y libertad habla nuestro latinista tuitero.