Foto: Cortesía de © Paco Manzano
¡Mientras se boxea no se canta!
Gritó José Luis Ortiz Nuevo (El poeta), árbitro del combate entre
Israel “Zapatitos” Galván y el cantaor / boxeador Cristian Guerrero, en el
espectáculo La lucha vuelve al Price (2010).
Un amigo se ha llevado una indigestión flamenca por engullirse a
varios heterodoxos en mal estado o mal precocinados. Vamos, que le han sentado
mal; lo ha contado en el primer bar de urgencias y allí uno apoyado en la barra
le dijo:
-Un ...cólico.
-¿Queeé?
-Que sufre usted un flamencólico.
Mi amigo tiene el cabreo por duplicado, el que llevaba puesto y
el que se ha pillado en “urgencias”.
Cuenta José Manuel Gamboa que la primera Antología flamenca (la
de Hispavox) fue iniciativa de los franceses que la publicaron allá en 1954 y
que no se editó en España hasta 1957 con la llegada del microsurco (el momento
en el que se pasa de los discos de pizarra a los de vinilo) y lo cuenta en el
esclarecedor libro “Rafael Romero… y el nacimiento del microsurco flamenco en
España” (Flamenco vive). Y dice Gamboa que transformar la caña a pasodoble es
el mayor atrevimiento discográfico grabado por Rafael Romero.
Cuentan que toda la historia del flamenco no es sino la gran
historia de la heterodoxia y escribe Pedro G que la ortodoxia no existe y dice
Niño de Elche que es una utopía.
Si Niño de Elche calca la interpretación de Rafael Romero eso
¿es, o no es, flamenco?
¿Era flamenco lo de Rafael Romero?
Nos gusta la vehemencia de Eugenio Noel y nos gusta en la voz
del de Elche con los tacones de Israel Galván y nos gusta la versificación que
ha hecho Pedro G. Nos gusta Rafael Riqueni y nos gusta Morente y los mensajes
que nos deja. Nos gusta Soleá Morente y El Pollito de California y nos gusta
Niño de Elche cantando un pasodoble cantado por Rafael Romero el Gallina y nos
gusta que Gamboa le llame por su nombre y apellido. Punto.
Y claro que nos gusta Rosario la Tremendita que ha hecho un
disco no apto para todos los públicos.
“En un cuartito los dos
veneno que tú tomaras
veneno tomara yo”
(leído en el disco de Veneno, que sí, que no, que tampoco es
flamenco).