Tío Gregorio el Borrico y John Coltrane me parecen que, en
esencia, están contando la misma historia.
Repasamos algunos conciertos históricos. Por un lado la
célebre última gira de Miles Davis con John Coltrane en la que se hizo patente
que ambos músicos iban en diferentes direcciones. Coltrane montaría su célebre
cuarteto en busca de su A Love Supreme (1964) y Miles renovó su quinteto con
Wayne Shorter camino de su siguiente aventura: el jazz rock.
En este momento 1960 Miles Davis le reprocha a Coltrane que
hace solos muy largos.
- Tío me meto y no sé cómo parar, responde Coltrane.
La respuesta de Miles Davis es cortante:
- Prueba a quitarte el saxo de la boca.
Miles había firmado Kind of Blue en 1959 y todo el mundo
era consciente de que ahí estaba de nuevo el presente y el futuro del jazz y
una de la mayores contribuciones a la música del siglo XX. En 1960 se editan Sketches of Spain de Miles Davis, ¡Olé! De John Coltrane pero es Coltrane el que resulta más “flamenco” porque su
estilo y su sonido se acercan al alma de la seguiriya. Por otro lado, Coltrane
está en plena vorágine creativa. Baste mencionar los discos grabados como líder
entre 1959 y 1962. Eso nos da una idea
de cómo funciona la industria del jazz alimentada por una buena cantidad de
aficionados, más o menos insaciables.