Dentro de nuestro espacio Nudos de emoción analizamos el recitativo, el aria y la cabaletta del segundo acto de Los puritanos, lo que se puede considerar el aria de la locura del personaje belliniano. Con pelos y señales nos la canta Joan Sutherland en compañía de Nicolai Ghiaurov y Piero Cappuccilli. Maria Callas le da la réplica. Después recuperamos brevemente la figura del tenor italiano Francesco Albanese, voz de ciertos brillos y artista famoso un día. Nos ofrece Dicitencello vuie de Falvo, una hermosa canción napolitana, y Dei miei bollenti spiriti de La Traviata de Verdi con su recitativo Lunge da le per me non va dilecto. Cierra con el comienzo de Core’ngrato de Cardillo.