Gesamtlänge aller Episoden: 6 days 1 hour 42 minutes
Llega al condado de Essex una joven institutriz. Su cometido será el de estar al cuidado de dos niños huérfanos que viven en una vieja mansión. Nuestra protagonista es la encargada de sustituir a la señorita Jessel, la anterior institutriz que murió en extrañas circunstancias. La señora Grose, el ama de llaves, recibe a la institutriz y la guía por las estancias de la casa.Todo pinta bien: la casa es estupenda, los niños, Miles y Flora, son simpáticos, el entorno es insuperable...
Llega al condado de Essex una joven institutriz. Su cometido será el de estar al cuidado de dos niños huérfanos que viven en una vieja mansión. Nuestra protagonista es la encargada de sustituir a la señorita Jessel, la anterior institutriz que murió en extrañas circunstancias. La señora Grose, el ama de llaves, recibe a la institutriz y la guía por las estancias de la casa.Todo pinta bien: la casa es estupenda, los niños, Miles y Flora, son simpáticos, el entorno es insuperable...
En Londres ha tenido lugar un brutal asesinato, la víctima es la rica y viuda anciana Mrs. Emily French. Tras su muerte, la viuda deja toda su fortuna a Leonard Vole, un joven con el que aparentemente mantuvo una relación sentimental. Vole se convierte al instante en objetivo de toda sospecha. Y la sirvienta de la señora French está convencida de ello...
En Londres ha tenido lugar un brutal asesinato, la víctima es la rica y viuda anciana Mrs. Emily French. Tras su muerte, la viuda deja toda su fortuna a Leonard Vole, un joven con el que aparentemente mantuvo una relación sentimental. Vole se convierte al instante en objetivo de toda sospecha. Y la sirvienta de la señora French está convencida de ello...
De todos los impulsos que puede tener un ser humano puede tener a lo largo de su vida, quizás uno de los más efervescentes, excitantes y necesarios sea la audacia. La audacia es una de esas cualidades tan poderosas que hace, por sí sola, el trabajo de marcar la diferencia. Ella explora y descubre. Al audaz interno hay que ayudarle a que salga a pasear y descubrir. Ahora necesitamos un anfitrión, por ejemplo, Sherlock Holmes...
De todos los impulsos que puede tener un ser humano puede tener a lo largo de su vida, quizás uno de los más efervescentes, excitantes y necesarios sea la audacia. La audacia es una de esas cualidades tan poderosas que hace, por sí sola, el trabajo de marcar la diferencia. Ella explora y descubre. Al audaz interno hay que ayudarle a que salga a pasear y descubrir. Ahora necesitamos un anfitrión, por ejemplo, Sherlock Holmes...
"Cerdos", así llamaba Jeffrey Dahmer a sus víctimas. Diecisiete hombres autoestopistas de los que se enamoraba el carnicero de Milwaukee y de los que abusó, asesinó y descuartizó. Dahmer reconoció también haber practicado la necrofilia y el canibalismo. Joven, rubio y gran seductor, lo tenía todo para ser el monstruo más bello y retorcido del siglo XX.
Mónica González Álvarez es la periodista encargada de traernos el primer caso real de esta cuarta temporada de 'Negra y Criminal'...
"Cerdos", así llamaba Jeffrey Dahmer a sus víctimas. Diecisiete hombres autoestopistas de los que se enamoraba el carnicero de Milwaukee y de los que abusó, asesinó y descuartizó. Dahmer reconoció también haber practicado la necrofilia y el canibalismo. Joven, rubio y gran seductor, lo tenía todo para ser el monstruo más bello y retorcido del siglo XX.
Mónica González Álvarez es la periodista encargada de traernos el primer caso real de esta cuarta temporada de 'Negra y Criminal'...
Segundo caso real de esta cuarta temporada de ‘Negra y Criminal’. La mañana del lunes 9 de noviembre del año 1987 el país quedaba conmocionado. Hablamos del secuestro de Melodie Nakachian, la hija de la cantante coreana Kimera, quizá no recordada por sus canciones, pero sí por sus maquillajes exagerados, y del magnate libanés Raymond Nakachian a los pocos meses de haberse trasladado a Marbella.
Segundo caso real de esta cuarta temporada de ‘Negra y Criminal’. La mañana del lunes 9 de noviembre del año 1987 el país quedaba conmocionado. Hablamos del secuestro de Melodie Nakachian, la hija de la cantante coreana Kimera, quizá no recordada por sus canciones, pero sí por sus maquillajes exagerados, y del magnate libanés Raymond Nakachian a los pocos meses de haberse trasladado a Marbella.